El obispo de Tierra del Fuego y Santa Cruz, Juan Carlos Romanín, permaneció la semana pasada varios días en la isla, donde pudo tomar contacto con la realidad fueguina a través de reuniones formales e informales con diferentes sectores. Se recuerda que Romanín en la ciudad de Río Gallegos participó el año pasado de diversas concentraciones y movilizaciones contra el autoritarismo del gobierno provincial kirchnerista en Santa Cruz.En una entrevista mantenida en AIRE LIBRE FM, el prelado sostuvo que "me preocupa lo que sucede con la Educación en Tierra del Fuego, es una realidad muy delicada donde el Sutef esta muy firme y tiene muchas exigencias", acotando al respecto que "este gremio ha endurecido mucho su postura, y en todo diálogo hay que tener tiempos, incluídos los tiempos de las paritarias".
Acotó monseñor Romanín que "no veo que el gremio tenga la paciencia que se requiere cuando se abre una mesa de diálogo", completó.
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