Hugo Cóccaro sorprendió a todos en la reunión que hizo con su gabinete el lunes pasado en Tierra del Fuego. “Me voy el 9 de julio”, aseguró. De inmediato, el frío comenzó a correr por la espalda de varios de sus ministros. “No podés irte tan rápido. No nos das tiempo a cerrar ningún expediente”, lo interrumpió uno de sus funcionarios. Cerca del gobernador derrotado, admiten que no hay que descartar una entrega anticipada del poder de común acuerdo con la gobernadora electa Fabiana Ríos. Es que las cuentas de la provincia están en rojo. Y si el ARI no aceptará, hay peronistas a quienes ni siquiera los perturba que asuma en lugar de Cóccaro la presidenta interina de la legislatura provincial, la manfredotista Angélica Guzmán.

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